Tuvimos el regalo de la compañía, calidez y profesionalismo de la profesora Rosa Jiménez, de la Universidad de Cartagena, durante los meses que fue nuestra compañera en ‘Transformemos: Territorios Construyendo Paz’, como Directora del Observatorio de Desplazamiento, Conflictos y Construcción de Paz, de esa Universidad. Su inesperada partida deja un enorme vacío, en especial en la gente de su Caribe natal, donde estudiantes y personas del territorio se quedan con todas sus enseñanzas y aportes a la construcción de paz de la región y del país. Homenaje.
La profesora Rosa Jiménez Ahumada era trabajadora social, magister en educación, docente desde 1993 de la Universidad de Cartagena, y, según sus estudiantes y cercanos, “amante de los Montes de María, y de la paz”. “No era una mujer de protocolos, trataba igual al presidente y al pordiosero”, dice Anita Pombo, compañera de trabajo en la UniCartagena.
El bus en el que la profesora Rosa y varios integrantes del colectivo ‘Fuerza Montemariana’ se desplazaban a los Montes de María el 2 de julio, para trabajar apoyando una jornada de asesoría jurídica, se accidentó y la profesora sufrió contusiones que finalmente ocasionaron su deceso el 11 de julio.
Más que sus títulos era su amabilidad, ideas, fuerza y energía los que la hicieron destacarse en su papel de docente de la Facultad de Ciencias Sociales y Educación, directora de la Maestría en Conflicto Social y Construcción de Paz, directora del Observatorio de Desplazamiento, Conflictos y Construcción de Paz por 17 años. Maestra y constructora de paz.
Cientos de voces de la academia del país y de organizaciones e institucionalidad del sector social expresaron su tristeza por la partida de la profesora Rosa, y dieron sus condolencias a sus hijos y demás familiares, alumnos, colegas, y a la Universidad de Cartagena.
A manera de homenaje compartimos un recuerdo en video, de momentos de la profesora Rosa con el equipo de ‘Transformemos: Territorios Construyendo Paz’, que atesoraremos en nuestra memoria. Gracias, Rosa Jiménez Ahumada, por una vida de coherencia con la paz de Colombia: